viernes, 26 de febrero de 2010

Folgore II

 Bueno, nueva entrega. Parece que cojo ya un poco de ritmo. Aunque he dejado abandonadas otras cosas...



-Muy bien señores. Las nuevas baterías funcionan perfectamente.- Klaus estaba de pie, con una pantalla a su espalda, y la cara iluminada por el proyector, que mostraba una sección de un microchip. A su alrededor, sentados en una mesa de reuniones, tres hombres le escuchaban atentamente. -Les felicito.
-Gracias. La verdad es que no costó tanto cómo pensábamos y la posibilidad de disponer de Litio suficiente como para hacer todas las pruebas necesarias, fue de gran ayuda.- Había hablado uno de ellos, que era alto y con gafas de montura metálica, que apoyaba en una nariz aguileña. Su rostro era feroz, pero contrastaba con su voz suave y educada.
-Hay que reconocer que gracias a la mejora del rendimiento de los distintos componentes pudimos hacerlo. Sino, seguiría teniendo poca autonomía.- Un individuo algo más bajo, pero de anchos hombros y tripa aún más ancha. Tenía una cara afable y fumaba un humeante puro. Nervioso, pasaba varias veces la mano por su calva.
-Señor. ¿Está seguro de que es necesario que se deje ver tanto en público? Si bien trabajamos en secreto, creo que deberíamos esperar hasta estar seguros del funcionamiento de todas las herramientas antes de dejarlo volar y realizar tareas de campo.- Ahora era uno más joven, de complexión fuerte, gafas y pelo cuidado. Vestía con vaqueros, y parecía fuera de lugar.
-Johann, tranquilo. Y recuerda que aquí todos estamos al mismo nivel. Nada de formalismos. Mi padre me trataba así, y es algo que me desagrada enormemente.-
-¿El trato?-
-No, mi padre.- Rió. -Bien, veamos. Vosotros sois los genios. Yo pago, pero vuestros cerebros son los que han hecho posible que Folgore vuele por la ciudad. También sois los que habéis desarrollado una nueva forma de obtener litio, así cómo la tecnología necesaria para fabricar el traje. Y eso, aunque no tan miniaturizado y potenciado, me está dando mucho, mucho dinero. Debéis continuar así, porque además hay gente que depende de vosotros..- Sus ojos brillaban por la luz y la emoción.
-Pero, los datos que nos pide aquí... Quiero decir, los repulsores funcionan de maravilla, y alcanzan los 556 kilómetros por hora...-
-Lo sé, pero necesito más.- Lo interrumpió. -La gente de esta mañana necesitaba más. No, no me miréis así, me he expresado mal. No os culpo. Vuestro trabajo ha sido excelente, mejor que todos los científicos que se han dedicado a estos campos. Pero quiero más rapidez. La meta está en Mach 1.-
Un silbido de sorpresa. Tres caras pensando cómo resolver eso. Ninguna respuesta.
-Bueno, podríamos intentar aumentar la conducción en los repulsores, pero necesitará de mayor energía, y de algún superconductor que no conocemos todavía...- Dejó de hablar un momento, y se giró hacia su colega fumador. -Y un superconductor así...-
-Tendríamos que concebirlo nosotros mismos...-
-¡Bingo!- Klaus se apoyó en la mesa. -¡Cuento con vosotros! Sabéis que InGlucc está a vuestra entera disposición.-
-Pero los otros proyectos...-
-Contrataremos a más gente. Si sabéis de alguien que pudiera estar interesado... Si los avaláis vosotros me parece bien. Aunque nuestro pequeño secreto seguirá siendo nuestro. Cualquier nueva incorporación trabajará en el proyecto, pero los detalles finales serán pulidos en esta mesa.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario